Mi nombre es Ilse, escritora, poeta e ingeniera mexicana. Mi primer libro Mujeres a punto de volar ya está a la venta.
Si de repente callo
y me miras a los ojos
verás destellos,
es mi mente gestando
las galaxias, las ideas, las historias,
y si te acercas,
podrás escuchar melodías
los himnos y las odas
puedo crear,
porque soy mujer
Hoy, por un breve momento
nos desanclamos de la rutina
y nos desbordamos de pensamientos
y recordamos que tenemos sueños
bailamos,
bailamos,
gozamos,
por un breve momento
Era el sonido de las pájaras
que callaban
entre las copas de los árboles
Eran las olvidadas,
las desoladas,
las que fueron robadas de la palabra
Pero llega el día,
en que un rumor trepidante
la tierra parte
Y las pájaras vuelan,
las pájaras rugen
y el cielo arde.
La abuela Hortencia murió segura de que en su próxima vida ya no iba ser una flor de interior, no iba a estar plantada en una maceta de cerámica fina colocada cuidadosamente en el alféizar de la ventana de la cocina, dedicándose a ver la gente pasar. La abuela estaba segura de que en la próxima vida sería una flor perenne, de esas que crecen al pie de las montañas.
Así que hoy nazco. Yo, Ilse Anónima, porque anónima siempre fue una mujer. Con este apellido tengo la esperanza de darle voz a las mujeres de mi familia, porque sé que de sus sacrificios nacieron mis privilegios y ya es hora que seamos nosotras las que contemos nuestras historias.
Ilse Anónima