#1 ¿Dónde comienza la noción de que la maternidad es una obligación y no una decisión?
Últimamente he estado tratando de entender porque creemos o creíamos que la maternidad es una obligación y no una decisión y, aunque puede parecer obvio que hay miles de razones, algunas tan simples como una visita a la sección de juguetes de Walmart; a través de este proyecto quiero buscar situaciones específicas de mi infancia y juventud que hayan sembrado la idea de que la maternidad es una obligación y no una decisión.
Tal vez también explore las situaciones que arrancaron (¿fumigaron?) la idea.
Para plasmar mis recuerdos decidí usar como medio el bordado. Mi abuelita me enseñó a bordar cuando tenía 10 u 11 años en un verano que pasé en la Ciudad de México cuando iba a visitar a mi mamá y mi papá que en ese entonces estaban estudiando medicina; me enseñó para mantenerme entretenida y creo que después de ese verano no volví bordar.
Las artes textiles han sido consideradas trabajo de mujeres y por mucho tiempo no fueron dignas de museos porque no se adaptan al canon; muchas mujeres las han usado desde siempre para expresarse y crear.
Comencemos,
Memoria 1 - Naces, creces, te reproduces y mueres
Debe de ser en primaria cuando nos enseñan esta “verdad absoluta”, la maestra debió de haber dicho algo como que todos los seres vivos nacemos, crecemos, nos reproducimos y morimos, que era el ciclo de la vida y que nosotros como seres vivos también teníamos que crecer, reproducir y morir.
Ya nacemos, siempre crecemos y vamos a morir, pero ¿reproducir?, ¿re-producir?, ¿volver a producir?, ¿volver a producir qué? Y ¿cómo para qué? ¿con qué propósito?
Que palabra tan curiosa es “reproducción”, para mí tiene tintes capitalistas ¿no?, ¿a quién sirven tantos humanos que producimos?
En fin, creo que hubiera estado bien que la maestra nos hubiera dicho que la reproducción no es un hecho y que vamos a crecer y morir pero que no todos los seres vivos se reproducen y que eso está bien.
O, que algunos podemos producir otras cosas que no sean hijos y que eso también está bien.
Entonces; para esta primer memoria decidí tachar la reproducción del ciclo de vida, no porque ya no nos vayamos a reproducir, si no con la esperanza de que deje de parecer una obligación.